Especialistas en metal, disponen de amplias estanterías que se despliegan desde la pared y que contienen centenares de CD’s. Sin embargo, seguro que las agencias de viaje no han barajado el interés de los amantes de la música pop, rock o, en nuestro caso, heavy metal, por una ciudad como Milán. Los melómanos tienen decenas de opciones a la hora de buscar discos en una ciudad en la que el formato físico todavía no se ha rendido del todo a las descargas de la red. Sin embargo, de la explosión blanca con su nueva conquista se pasó casi al instante a la implosión: Ronaldo dejó caer su marcha del club, Bale amenazó con lo mismo si no tenía más protagonismo y, a los dos días, Zidane cogió la puerta y se marchó. Ronaldo tenía por aquel entonces un buen puñado de ex equipos a sus espaldas, uno de ellos era el Inter de Milán, el club que le acunó cuando sufrió sus graves lesiones de rodilla, el equipo que se sintió frustrado cuando le vio marchar al Madrid, y la mitad de la ciudad que recibió con ira su fichaje por el Milan, el eterno rival. Antes del partido Ronaldo recibió otro jarro de agua fría.
Cuatro años y nueve meses después de su último partido en Serie A, entonces como jugador del Inter, el brasileño regresó victorioso al calcio, con la camiseta del AC Milan en el partido liguero contra el Livorno. Los mejores fueron un disparo desde fuera del área que obligó al meta del Livorno a la parada (m.82) y un disparo que se perdió junto a la cepa del poste derecho (m.84). Nuestro propósito es inspirar a la gente reviviendo a las leyendas del fútbol. Podrá contemplar y rezar a la pequeña Madonnina, situada en la aguja más alta, y de reojo contemplar las vistas. Las tiendas más glamurosas, elegantes y fashion de la urbe las encontrará en el cuadrilátero de la moda. Quienes tengan un poco más de tiempo llegarán hasta el Castillo Sforzesco, ubicado muy cerca del centro histórico, o podrán pasear por el barrio de la moda con sus calles estrechas plagadas de tiendas con precios imposibles, que constituyen todo un referente en la moda a escala mundial. En su interior acoge restaurantes históricos, bares y tiendas de moda y es famosa por su pavimento de mosaicos y las vidrieras que le sirven de techo. Pero aquel año no iba a ser el máximo artillero de la competición: le superó Puskas, que marcó cuatro en la final.
Además de los establecimientos de lujo, existen outlets, tanto en las afueras como en el centro de la ciudad, con descuentos de hasta el 70% en grandes marcas. Decorado con infinidad de fotografías y demás atrezzo, forma parte de una cadena que cuenta con establecimientos en diferentes ciudades de Italia. Era aquella una plantilla plagada de extranjeros en la que los argentinos (Zanetti, Diego Milito, Cambiasso, Samuel) y los brasileños (Julio César, Maicon y Lucio) tenían un gran predicamento, pero había jugadores de otras 11 nacionalidades, italianos incluidos. El madridismo creyó entonces que todo el monte era orégano. Su antigua afición, la del Inter, le recibió con los agudos pitidos de casi 30.000 silbatos de color naranja, además de con pancartas que viajaban de la broma al insulto: «Te fuiste como conejo y ahora vuelves como cerdo», por ejemplo. La Copa de Europa nació en 1955 por iniciativa del diario deportivo francés L’Équipe, y con el apoyo de la UEFA.